ÍNDICE

Proyecto:
Te ayudamos a vivir

         Desde la Fundación José Luis Montesinos, bajo la colaboración de la Concejalía de Servicios Sociales del Excmo. Ayuntamiento de Puerto de la Cruz, y el apoyo económico de la Obra Social La Caixa, en respuesta a una necesidad social procedente de usuarios con bajos recursos, que presentan una discapacidad, la cual les impide tener una calidad óptima de vida diaria, presentamos una iniciativa solidaria y asistencial, denominada: “Te ayudamos a vivir”, la cual está basada en ofrecer, elementos de apoyo que cubran las necesidades básicas de la actividad cotidiana, tales como: muletas, sillas de ruedas, bastones, andadoras, artículos de aseo, seguridad, higiene, etc.

        Un proyecto social que permite aportar a la población más desfavorecida de nuestra sociedad, movilidad, independencia, salud y esperanza. Una apuesta a la calidad de vida que podremos llevar a cabo, junto a la colaboración de empresas afines a los ideales de nuestra Fundación.

        Se trata de dar respuesta a una necesidad social, a la cual queremos hacer frente, a través del compromiso que nos otorga nuestra Institución, y la intervención solidaria de quienes consideran la dependencia, un estado de vida que precisa de una mayor concienciación ciudadana, y una atención directa, dotada de soluciones inmediatas.

Proyecto "Ayudas Técnicas"

Introducción, Justificación

INTRODUCCIÓN:
        La misión con la que nace la Fundación José Luis Montesinos es ofrecer programas de educación a los más desfavorecidos con un denominador común: la salud en su máxima expresión.
   Entendemos la salud como un medio para lograr lo que verdaderamente queremos ser, siendo las actividades físicas y mentales nuestras grandes aliadas.
        Desde la Fundación estamos convencidos de que el deporte, la formación, la concienciación ciudadana, y la socialización, son las herramientas básicas de integración sobre los cuales basamos todas nuestras acciones.
     A través de la educación y el deporte, logramos potenciar algunos de los valores que consideramos más importantes para la formación personal de cada uno de nuestros beneficiarios: el afán de superación, el esfuerzo, el respeto y la confianza, para finalmente, ser capaces de luchar por los objetivos planteados, teniendo en cuenta que, para el logro de estos fines, la salud física y mental prevalece como el máximo exponente.
       En resumen, la Fundación José Luis Montesinos trabaja en favor de todo aquello que precisa de ser mejorado para obtener como resultado, la Salud que te llevará al logro de tus propósitos de vida.
     En esta ocasión, nos preocupan las personas que requieren de apoyos instrumentales para su desenvolvimiento y carecen de los medios para lograrlo.

INTRODUCCIÓN:
        La misión con la que nace la Fundación José Luis Montesinos es ofrecer programas de educación a los más desfavorecidos con un denominador común: la salud en su máxima expresión.
   Entendemos la salud como un medio para lograr lo que verdaderamente queremos ser, siendo las actividades físicas y mentales nuestras grandes aliadas.
        Desde la Fundación estamos convencidos de que el deporte, la formación, la concienciación ciudadana, y la socialización, son las herramientas básicas de integración sobre los cuales basamos todas nuestras acciones.
     A través de la educación y el deporte, logramos potenciar algunos de los valores que consideramos más importantes para la formación personal de cada uno de nuestros beneficiarios: el afán de superación, el esfuerzo, el respeto y la confianza, para finalmente, ser capaces de luchar por los objetivos planteados, teniendo en cuenta que, para el logro de estos fines, la salud física y mental prevalece como el máximo exponente.
       En resumen, la Fundación José Luis Montesinos trabaja en favor de todo aquello que precisa de ser mejorado para obtener como resultado, la Salud que te llevará al logro de tus propósitos de vida.
     En esta ocasión, nos preocupan las personas que requieren de apoyos instrumentales para su desenvolvimiento y carecen de los medios para lograrlo.

JUSTIFICACIÓN:
    El Consejo de Europa, en su Resolución de 1998, define la dependencia en términos generales como «la necesidad de ayuda o asistencia importante para las actividades de la vida cotidiana». Y, más concretamente, añade que es el estado en el que se encuentran personas que, por razones ligadas a la falta de pérdida de autonomía física, psíquica o intelectual, tienen necesidad de asistencia y/o ayuda importantes para realizar las actividades de la vida cotidiana».
      Por tanto, la dependencia está asociada con tres factores: la existencia de una limitación física, psíquica o intelectual que merma de las capacidades de la persona; la incapacidad de la persona para realizar por sí misma las actividades de la vida diaria y, la necesidad de asistencia, ayuda o cuidados por parte de una tercera persona.
     Este concepto ha sido recogido expresamente en la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de Dependencia. Según el Artículo 2 la Dependencia es un «estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, y las ligadas a la falta o la pérdida de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, precisan de la atención de otra u otras personas o ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria o, en el caso de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, de otros apoyos para su autonomía personal».
      Al igual que la discapacidad, la deficiencia y la minusvalía, la dependencia afecta a toda la estructura de la población por edades. La dependencia puede aparecer en cualquier momento de la vida o no aparecer nunca, aunque es más habitual entre las personas mayores de 65 años. Por tanto, no podemos limitar el fenómeno de la dependencia a la población mayor de 65 años, aunque ellas son las que con más intensidad se ven afectadas.
     En cuanto a las discapacidades que afectan a las personas mayores de 65 años y que dan lugar a situaciones de dependencia, la discapacidad más frecuente consiste en la dificultad para desplazarse fuera del hogar, tanto sin medio de transporte como sin él. En segundo lugar, habría que destacar la discapacidad para llevar a cabo tareas del hogar y otras relacionadas con la movilidad.
      La población de los discapacitados mayores constituye un grupo importante aumentando ésta en la misma proporción que aumenta la variable. A consecuencia del envejecimiento aparecen bastantes discapacidades asociadas a enfermedades del corazón, a la artritis ya la pérdida del oído y la vista. La edad se constituye en sí misma como origen de discapacidades. Existe, por tanto, una asociación directa entre las limitaciones en la capacidad funcional y el aumento de la edad, aumentando considerablemente en las cohortes más ancianas.
       Existen cinco enfermedades comunes a partir de los 65 años que desencadenan las dificultades en la autonomía para realizar AVD y actividades instrumentales de la vida diaria (AIVD). Con mucha frecuencia las personas mayores de 65 años se enfrentan a enfermedades comunes como la artritis, el infarto o los accidentes cardiovasculares, la demencia o el Alzheimer, el Parkinson o la distrofia muscular. A partir del diagnóstico de esas enfermedades se presentan efectos en la salud que limitan las habilidades de las personas para desenvolverse en sus vidas.
     De esta manera surgen la mala visión, los problemas en el aparato cardiovascular, las deficiencias osteoarticulares, procesos degenerativos que provocan deficiencias múltiples y demencias que tienen como consecuencia que la persona mayor muestre dificultades para desplazarse fuera del hogar y le sea difícil salir sin ayuda.
       Por otra parte, la sinergia de las deficiencias osteoarticulares, los procesos degenerativos, las demencias y las deficiencias en el sistema nervioso, dificultan la movilidad dentro del propio hogar hasta tal punto que, asearse, vestirse u orientarse, pueden plantear graves limitaciones que generar dependencia.
     Por último, los procesos degenerativos, las demencias y las deficiencias del sistema nervioso llegan a hacer que necesiten ayuda para comer y evitar las consecuencias de la incontinencia.
       En definitiva, las últimas deficiencias con mayor incidencia en las personas mayores, las últimas tendencias en las últimas generaciones, las últimas tendencias en las últimas generaciones la autonomía, el cuidado personal (AVD) y las tareas domésticas (AIVD), derivando en muchos casos en situaciones de fragilidad general y dependencia de otras personas. estos grupos de deficiencias son los que provocan por término medio un mayor número de discapacidades (gráfico).

JUSTIFICACIÓN:
    El Consejo de Europa, en su Resolución de 1998, define la dependencia en términos generales como «la necesidad de ayuda o asistencia importante para las actividades de la vida cotidiana». Y, más concretamente, añade que es el estado en el que se encuentran personas que, por razones ligadas a la falta de pérdida de autonomía física, psíquica o intelectual, tienen necesidad de asistencia y/o ayuda importantes para realizar las actividades de la vida cotidiana».
      Por tanto, la dependencia está asociada con tres factores: la existencia de una limitación física, psíquica o intelectual que merma de las capacidades de la persona; la incapacidad de la persona para realizar por sí misma las actividades de la vida diaria y, la necesidad de asistencia, ayuda o cuidados por parte de una tercera persona.
     Este concepto ha sido recogido expresamente en la Ley de Promoción de la Autonomía Personal y Atención a las personas en situación de Dependencia. Según el Artículo 2 la Dependencia es un «estado de carácter permanente en que se encuentran las personas que, por razones derivadas de la edad, la enfermedad o la discapacidad, y las ligadas a la falta o la pérdida de autonomía física, mental, intelectual o sensorial, precisan de la atención de otra u otras personas o ayudas importantes para realizar actividades básicas de la vida diaria o, en el caso de las personas con discapacidad intelectual o enfermedad mental, de otros apoyos para su autonomía personal».
      Al igual que la discapacidad, la deficiencia y la minusvalía, la dependencia afecta a toda la estructura de la población por edades. La dependencia puede aparecer en cualquier momento de la vida o no aparecer nunca, aunque es más habitual entre las personas mayores de 65 años. Por tanto, no podemos limitar el fenómeno de la dependencia a la población mayor de 65 años, aunque ellas son las que con más intensidad se ven afectadas.
     En cuanto a las discapacidades que afectan a las personas mayores de 65 años y que dan lugar a situaciones de dependencia, la discapacidad más frecuente consiste en la dificultad para desplazarse fuera del hogar, tanto sin medio de transporte como sin él. En segundo lugar, habría que destacar la discapacidad para llevar a cabo tareas del hogar y otras relacionadas con la movilidad.
      La población de los discapacitados mayores constituye un grupo importante aumentando ésta en la misma proporción que aumenta la variable. A consecuencia del envejecimiento aparecen bastantes discapacidades asociadas a enfermedades del corazón, a la artritis ya la pérdida del oído y la vista. La edad se constituye en sí misma como origen de discapacidades. Existe, por tanto, una asociación directa entre las limitaciones en la capacidad funcional y el aumento de la edad, aumentando considerablemente en las cohortes más ancianas.
       Existen cinco enfermedades comunes a partir de los 65 años que desencadenan las dificultades en la autonomía para realizar AVD y actividades instrumentales de la vida diaria (AIVD). Con mucha frecuencia las personas mayores de 65 años se enfrentan a enfermedades comunes como la artritis, el infarto o los accidentes cardiovasculares, la demencia o el Alzheimer, el Parkinson o la distrofia muscular. A partir del diagnóstico de esas enfermedades se presentan efectos en la salud que limitan las habilidades de las personas para desenvolverse en sus vidas.
     De esta manera surgen la mala visión, los problemas en el aparato cardiovascular, las deficiencias osteoarticulares, procesos degenerativos que provocan deficiencias múltiples y demencias que tienen como consecuencia que la persona mayor muestre dificultades para desplazarse fuera del hogar y le sea difícil salir sin ayuda.
       Por otra parte, la sinergia de las deficiencias osteoarticulares, los procesos degenerativos, las demencias y las deficiencias en el sistema nervioso, dificultan la movilidad dentro del propio hogar hasta tal punto que, asearse, vestirse u orientarse, pueden plantear graves limitaciones que generar dependencia.
     Por último, los procesos degenerativos, las demencias y las deficiencias del sistema nervioso llegan a hacer que necesiten ayuda para comer y evitar las consecuencias de la incontinencia.
       En definitiva, las últimas deficiencias con mayor incidencia en las personas mayores, las últimas tendencias en las últimas generaciones, las últimas tendencias en las últimas generaciones la autonomía, el cuidado personal (AVD) y las tareas domésticas (AIVD), derivando en muchos casos en situaciones de fragilidad general y dependencia de otras personas. estos grupos de deficiencias son los que provocan por término medio un mayor número de discapacidades (gráfico).

Las Ayudas Técnicas

Fuente: ALEMAN BRACHO, CARMEN. DEPENDENCIA Y SERVICIOS SOCIALES (2013)

    Como se puede deducir de lo hasta ahora escrito, las personas con discapacidad podemos llegar a ser todos / as nosotros / as. Las innumerables incidencias que pueden producirse en el transcurso de nuestro devenir diario, pueden producir que suframos algún accidente y/o enfermedad, así que por el mero hecho de envejecer.
    En este contexto se hace muy presente y necesario los medios que proporcionan una mejora en el desenvolvimiento personal y la calidad de vida como son las Ayudas Técnicas.
    Aunque existen numerosas y extensas definiciones de lo que es una Ayuda Técnica, éstas pueden ser definidas de una forma sencilla como:

  • Aquellos instrumentos dispositivos o herramientas que permiten, a las personas que presentan una discapacidad temporal o permanente, realizar actividades que sin dicha ayuda no podrían ser realizadas o requerirían de un mayor esfuerzo para su realización.

    La Ayuda Técnica debe permitir salvar o aminorar la deficiencia que presenta una persona o la discapacidad generada por ésta, de manera que contribuya a reducir su desventaja social. Para cumplir este objetivo, deben ser sencillas (tanto en su concepción como en su utilización) y eficaces en su objetivo, respondiendo de forma directa a las necesidades para las que han sido desarrolladas.
     No deben confundirse las Ayudas Técnicas, adaptaciones o dispositivos de autoayuda, con los Medios Técnicos, que son transformaciones realizadas en el hábitat tendentes a eliminar las barreras que marginan y excluyen a la persona con discapacidad.
     El grado de discapacidad, el entorno social del individuo y, en algunos casos, la capacidad y habilidad de éste para el aprendizaje y el adiestramiento serán elementos fundamentales a la hora de determinar la Ayuda y la Técnica adecuada para cada individuo.
     Históricamente el Catálogo de Prestaciones Ortoprotésicas se ha referido a las Ayudas Técnicas de carácter Ortoprotésico, dejando fuera otro tipo de Ayudas Técnicas.

    La Ayuda Técnica debe permitir salvar o aminorar la deficiencia que presenta una persona o la discapacidad generada por ésta, de manera que contribuya a reducir su desventaja social. Para cumplir este objetivo, deben ser sencillas (tanto en su concepción como en su utilización) y eficaces en su objetivo, respondiendo de forma directa a las necesidades para las que han sido desarrolladas.
     No deben confundirse las Ayudas Técnicas, adaptaciones o dispositivos de autoayuda, con los Medios Técnicos, que son transformaciones realizadas en el hábitat tendentes a eliminar las barreras que marginan y excluyen a la persona con discapacidad.
     El grado de discapacidad, el entorno social del individuo y, en algunos casos, la capacidad y habilidad de éste para el aprendizaje y el adiestramiento serán elementos fundamentales a la hora de determinar la Ayuda y la Técnica adecuada para cada individuo.
     Históricamente el Catálogo de Prestaciones Ortoprotésicas se ha referido a las Ayudas Técnicas de carácter Ortoprotésico, dejando fuera otro tipo de Ayudas Técnicas.

    Aunque recientemente han sido incluidos los audífonos, todavía no existe una conciencia clara de los bienes que pueden ser considerados Ayudas Técnicas, de la utilidad que aportan a las personas con discapacidad y de la necesidad de dar cobertura pública y gratuita a este tipo de bienes, para facilitar la inclusión en todos los ámbitos de la vida a las personas discapacitadas.
   Las Ayudas Técnicas, pese a ser un bien de primera necesidad para los usuarios y estar catalogadas como un producto sanitario, no gozan de cobertura para una prestación gratuita plena por parte del Sistema Nacional de Salud y de los Servicios de Salud de cada una de las diferentes Comunidades Autónomas que integran el Estado español. Dada la finalidad para la que son concebidas las Ayudas Técnicas, la falta de cobertura gratuita pública, es generadora de desigualdades entre el grupo de las personas con discapacidad, en función de las posibilidades de acceso que éstos tengan a las Ayudas Técnicas.
       No todas las personas con discapacidad tienen las mismas oportunidades y posibilidades a la hora de enfrentarse a su discapacidad y al entorno en el que viven. Las posibilidades de una persona con discapacidad para hacer frente a su discapacidad vendrán determinadas por su entorno económico, social y familiar.
     En el caso de las Ayudas Técnicas se produce la misma situación, y los condicionantes del entorno de una persona con discapacidad determinarán sus posibilidades de acceso a estos bienes y a su utilización como mecanismo para mitigar su deficiencia o superar su discapacidad y para intentar alcanzar una equiparación social similar a la de las personas sin discapacidad.

  •     DESTINATARIOS:

      El proyecto va destinado a aquellas personas residentes en el municipio de Puerto de La Cruz que presenten una situación de dependencia, precisen de algún tipo de Ayuda Técnica y carezca de los medios necesarios para su adquisición.
      La Fundación Canaria José Luis Montesinos, con su proyecto “Te ayudamos a vivir”, pretende facilitar diferentes productos que les permita contar con mayor autonomía y ayudarles en las actividades de la vida diaria a nuestros mayores, personas con problemas de movilidad, dificultades en el desenvolvimiento en la vida cotidiana, etc.

  •     OBJETIVOS:

    El Objetivo principal del Proyecto es la creación de un Servicio de Préstamo de Ayudas Técnicas.
Para ello se deberá:

  • Sensibilizar aquellas entidades susceptibles de colaborar con el proyecto.
  • Difundir servicio entre beneficiarios y entidades que trabajen.
  • Adquirir las Ayudas Técnicas.
  •  Ceder las Ayudas técnicas.
  • Realizar el seguimiento el proceso de préstamo.
  •     TEMPORIZACIÓN:

    La duración inicial del Proyecto es de dieciocho meses.
    Durante los primeros cuatro meses del Proyecto se realizarán contactos con entidades y organizaciones, tanto públicas como privadas, para difundir la iniciativa y que puedan colaborar en la financiación necesaria.
    En tres meses siguientes, se realizará una campaña de difusión en los recursos susceptibles de detectar y canalizar la demanda de posibles beneficiarios. A su vez, se procederá a la adquisición de las Ayudas Técnicas necesarias para la puesta en marcha del servicio.
    Entre los meses décimo y decimoctavo, se implementaría el Servicio. Se establecería los protocolos necesarios para valorar la demanda y dar respuesta a los posibles beneficiarios

    Aunque recientemente han sido incluidos los audífonos, todavía no existe una conciencia clara de los bienes que pueden ser considerados Ayudas Técnicas, de la utilidad que aportan a las personas con discapacidad y de la necesidad de dar cobertura pública y gratuita a este tipo de bienes, para facilitar la inclusión en todos los ámbitos de la vida a las personas discapacitadas.
   Las Ayudas Técnicas, pese a ser un bien de primera necesidad para los usuarios y estar catalogadas como un producto sanitario, no gozan de cobertura para una prestación gratuita plena por parte del Sistema Nacional de Salud y de los Servicios de Salud de cada una de las diferentes Comunidades Autónomas que integran el Estado español. Dada la finalidad para la que son concebidas las Ayudas Técnicas, la falta de cobertura gratuita pública, es generadora de desigualdades entre el grupo de las personas con discapacidad, en función de las posibilidades de acceso que éstos tengan a las Ayudas Técnicas.
       No todas las personas con discapacidad tienen las mismas oportunidades y posibilidades a la hora de enfrentarse a su discapacidad y al entorno en el que viven. Las posibilidades de una persona con discapacidad para hacer frente a su discapacidad vendrán determinadas por su entorno económico, social y familiar.
     En el caso de las Ayudas Técnicas se produce la misma situación, y los condicionantes del entorno de una persona con discapacidad determinarán sus posibilidades de acceso a estos bienes y a su utilización como mecanismo para mitigar su deficiencia o superar su discapacidad y para intentar alcanzar una equiparación social similar a la de las personas sin discapacidad.

  •     DESTINATARIOS:

      El proyecto va destinado a aquellas personas residentes en el municipio de Puerto de La Cruz que presenten una situación de dependencia, precisen de algún tipo de Ayuda Técnica y carezca de los medios necesarios para su adquisición.
      La Fundación Canaria José Luis Montesinos, con su proyecto “Te ayudamos a vivir”, pretende facilitar diferentes productos que les permita contar con mayor autonomía y ayudarles en las actividades de la vida diaria a nuestros mayores, personas con problemas de movilidad, dificultades en el desenvolvimiento en la vida cotidiana, etc.

  •     OBJETIVOS:

    El Objetivo principal del Proyecto es la creación de un Servicio de Préstamo de Ayudas Técnicas.
Para ello se deberá:

  • Sensibilizar aquellas entidades susceptibles de colaborar con el proyecto.
  • Difundir servicio entre beneficiarios y entidades que trabajen.
  • Adquirir las Ayudas Técnicas.
  •  Ceder las Ayudas técnicas.
  • Realizar el seguimiento el proceso de préstamo.
  •     TEMPORIZACIÓN:

    La duración inicial del Proyecto es de dieciocho meses.
    Durante los primeros cuatro meses del Proyecto se realizarán contactos con entidades y organizaciones, tanto públicas como privadas, para difundir la iniciativa y que puedan colaborar en la financiación necesaria.
    En tres meses siguientes, se realizará una campaña de difusión en los recursos susceptibles de detectar y canalizar la demanda de posibles beneficiarios. A su vez, se procederá a la adquisición de las Ayudas Técnicas necesarias para la puesta en marcha del servicio.
    Entre los meses décimo y decimoctavo, se implementaría el Servicio. Se establecería los protocolos necesarios para valorar la demanda y dar respuesta a los posibles beneficiarios

  •     RECURSOS:

     El coste del Proyecto se centrará principalmente en la adquisición de las Ayudas Técnicas para iniciar el Servicio (ANEXO I).
   Se ha seleccionado una serie de Ayudas Técnicas que reúnen dos características principales:

  • Gran demanda
  • Escasa o nula cobertura en el catálogo ortoprotésico del Sistema Nacional de Salud.

      Tanto los recursos materiales como personales restantes, son aportados por la propia Fundación José Luis Montesinos, como parte de la labor social que se viene prestando.
      En un principio, se ha determinado que para comenzar a prestar el servicio serían necesarias las siguientes Ayudas Técnicas. No se descarta que si el Proyecto tiene buena acogida pudiera ampliarse en mayor medida con mayor financiación.

  •     RECURSOS:

     El coste del Proyecto se centrará principalmente en la adquisición de las Ayudas Técnicas para iniciar el Servicio (ANEXO I).
   Se ha seleccionado una serie de Ayudas Técnicas que reúnen dos características principales:

  • Gran demanda
  • Escasa o nula cobertura en el catálogo ortoprotésico del Sistema Nacional de Salud.

      Tanto los recursos materiales como personales restantes, son aportados por la propia Fundación José Luis Montesinos, como parte de la labor social que se viene prestando.
      En un principio, se ha determinado que para comenzar a prestar el servicio serían necesarias las siguientes Ayudas Técnicas. No se descarta que si el Proyecto tiene buena acogida pudiera ampliarse en mayor medida con mayor financiación.

Andador de ruedas

Producto que proporciona una amplia base de apoyo y una gran seguridad,
ya que además de un buen equilibrio procura a la persona mayor tranquilidad psicológica
puesto que el riesgo de caída es menor.
Consta de empuñadura, estructura, pie de apoyo, contera y ruedas.
  • Fundación José Luis Montesinos
Ayudas
Técnicas

Sillas de ruedas manual, eléctrica o scooter

Dispositivos que proporcionan movilidad sobre ruedas y soporte corporal a personas con capacidad limitada
para caminar y son manejadas por el usuario o un asistente.
  • Fundación José Luis Montesinos

Muletas y bastones

Dispositivos que ayudan a la persona,
usuaria a caminar, y que se utilizan,
individualmente o por pares,
manipulados cada uno de ellos
por un brazo o una mano.
Facilitan la marcha aumentando la estabilidad,
amplía base de sustentación, y descarga
una o ambas piernas.
  • Fundación José Luis Montesinos
Ayudas
Técnicas

Camas articuladas

Las camas articuladas son aquellas que se dividen en diferentes planos y de manera voluntaria,
podemos cambiar el ángulo de estas para modificar la postura de la persona usuaria.
  • Fundación José Luis Montesinos
Ayudas
Técnicas

Teléfono

Con fotografías asociadas a una tecla, los teléfonos con teclas grandes,
Los teléfonos con ganancia de sonido o con amplificadores de voz
  • Fundación José Luis Montesinos
Ayudas
Técnicas

De uso personal
para el aseo
y vida diaria

Los denominados productos de apoyo lo constituyen este conjunto de artilugios, diseñados especialmente, para prevenir,
compensar, mitigar o neutralizar deficiencias o limitaciones sensoriales, motóricas, cognitivas, de orientación, etcétera.
En este sentido, la Fundación Canaria José Luis Montesinos pretende ofrecer, un servicio de préstamo,
que facilita muletas, sillas de ruedas, camas especiales, ayudas para la alimentación diaria,
el cuidado y aseo personal, etcétera.
  • Fundación José Luis Montesinos
  •     EVALUACIÓN:

     La Evaluación se realizará durante la fase de diseño del servicio y durante la fase de implementación del proyecto.
    En la fase de diseño del servicio se pretende evaluar si el servicio diseñado se adecua a la demanda planteada.
     En el período de implementación o puesta en marcha del Proyecto se procederá a una Evaluación del Servicio, tanto con los beneficiarios como las entidades que han derivado beneficiarios.
      Entre los aspectos a valorar, se tendrá en cuenta la idoneidad del Servicio, la Calidad del mismo, así como el Grado de Satisfacción de todos los implicados (Beneficiarios, Familias, Entidades que hayan Derivado a los demandantes, etc.).
      En un principio, se ha determinado la encuesta como técnica para evaluar los aspectos citados anteriormente. Para ello, se procederá a la elaboración de un cuestionario estructurado con alternancia de preguntas con respuestas cerradas y abiertas.
      A su vez, se le dará traslado de los resultados de la evaluación, tanto a los implicados directos del Servicio como aquellos que colaboraran desinteresadamente en el Proyecto.

  •     EVALUACIÓN:

     La Evaluación se realizará durante la fase de diseño del servicio y durante la fase de implementación del proyecto.
    En la fase de diseño del servicio se pretende evaluar si el servicio diseñado se adecua a la demanda planteada.
     En el período de implementación o puesta en marcha del Proyecto se procederá a una Evaluación del Servicio, tanto con los beneficiarios como las entidades que han derivado beneficiarios.
      Entre los aspectos a valorar, se tendrá en cuenta la idoneidad del Servicio, la Calidad del mismo, así como el Grado de Satisfacción de todos los implicados (Beneficiarios, Familias, Entidades que hayan Derivado a los demandantes, etc.).
      En un principio, se ha determinado la encuesta como técnica para evaluar los aspectos citados anteriormente. Para ello, se procederá a la elaboración de un cuestionario estructurado con alternancia de preguntas con respuestas cerradas y abiertas.
      A su vez, se le dará traslado de los resultados de la evaluación, tanto a los implicados directos del Servicio como aquellos que colaboraran desinteresadamente en el Proyecto.

  •     CONCLUSIÓN:

     Las personas mayores necesitan en su vida diaria, diferentes elementos que faciliten las diversas tareas y actividades que enfrentan en su vida cotidiana.
      En todas las facetas de nuestra vida cotidiana, usamos herramientas que nos permiten realizar las tareas que necesitamos de forma más sencilla, cómoda, con menor esfuerzo, y de la manera más efectiva: en el trabajo, en nuestro tiempo libre, para alimentarnos, para desplazarnos, etc. Permiten que todos podamos salvar o suplir aquellas limitaciones que la propia naturaleza nos impone.
    Desde este punto de vista, la Fundación José Luis Montesinos, ofrece Soluciones Integrales especializadas en resolver todas las actuaciones de cada necesidad, en una única intervención.

      A lo largo de nuestras vidas, hemos ido ganando progresivamente en autonomía e independencia. Todos queremos ser mayores para decidir sobre nuestras propias vidas, y que nadie nos imponga su voluntad.
      Queremos ser libres, e incluso, estamos dispuestos a aceptar nuestros propios errores, con el ánimo de aprender. Desde esta perspectiva, es lógico pensar, lo difícil que resultará descubrir que, en esta última etapa, tenemos que deshacer el camino, y volver a depender de los demás. Es inevitable que esta fase de la vida se entienda como una pérdida. Sin embargo, es fundamental utilizar la experiencia vital de la que disponemos, para darle la vuelta a estos inconvenientes, y ser capaces de mantener un buen estado anímico a pesar de ellos.

      Desde la Fundación José Luis Montesinos pensamos, que todos nosotros pasaremos por esta situación. Es ley de vida, y serán muchos de los que hoy nos cuidan a nosotros, quienes deberán ser cuidados mañana.

  •     CONCLUSIÓN:

     Las personas mayores necesitan en su vida diaria, diferentes elementos que faciliten las diversas tareas y actividades que enfrentan en su vida cotidiana.
      En todas las facetas de nuestra vida cotidiana, usamos herramientas que nos permiten realizar las tareas que necesitamos de forma más sencilla, cómoda, con menor esfuerzo, y de la manera más efectiva: en el trabajo, en nuestro tiempo libre, para alimentarnos, para desplazarnos, etc. Permiten que todos podamos salvar o suplir aquellas limitaciones que la propia naturaleza nos impone.
    Desde este punto de vista, la Fundación José Luis Montesinos, ofrece Soluciones Integrales especializadas en resolver todas las actuaciones de cada necesidad, en una única intervención.

      A lo largo de nuestras vidas, hemos ido ganando progresivamente en autonomía e independencia. Todos queremos ser mayores para decidir sobre nuestras propias vidas, y que nadie nos imponga su voluntad.
      Queremos ser libres, e incluso, estamos dispuestos a aceptar nuestros propios errores, con el ánimo de aprender. Desde esta perspectiva, es lógico pensar, lo difícil que resultará descubrir que, en esta última etapa, tenemos que deshacer el camino, y volver a depender de los demás. Es inevitable que esta fase de la vida se entienda como una pérdida. Sin embargo, es fundamental utilizar la experiencia vital de la que disponemos, para darle la vuelta a estos inconvenientes, y ser capaces de mantener un buen estado anímico a pesar de ellos.

      Desde la Fundación José Luis Montesinos pensamos, que todos nosotros pasaremos por esta situación. Es ley de vida, y serán muchos de los que hoy nos cuidan a nosotros, quienes deberán ser cuidados mañana.